Un buen 13 de enero de 2022 el REBI Cuenca comunicaba el fichaje de Nacho Pizarro. Llegaba el parón de navidad con un equipo conquense tres puntos por encima del descenso y fuera de la Copa del Rey. No estaban pasando por su mejor momento los de Lidio Jiménez, que necesitaba un revulsivo que pudiera venir en ese momento para cambiar el rumbo.
Buscaban un jugador que defendiera en el ‘2’ y ahí apareció la opción de Nacho Pizarro, avalado por Pablo Simonet y su hermano Fede, llegaron las primeras conversaciones y la predisposición total del ‘pitbull’, que no tardó en coger un vuelo para venir a Cuenca y firmar por un Ciudad Encantada que lo necesitaba.
Desde el minuto uno trajo consigo experiencia, garra, ganas de cambiar la situación y un carácter que ha hecho ganarse el respeto y el cariño de la afición del REBI Cuenca. Con pocos días de entrenamiento, pero con la lección bien aprendida, debutó en Benidorm jugando su primer gran partido, logrando Cuenca sus primeros dos puntos de la segunda vuelta y de 2022. Desde ahí hasta ahora el equipo no ha bajado el listón, logrando 64 puntos de 90 posibles, dos clasificaciones europeas, una final de Copa Plenitude Asobal y un subcampeonato en liga.
La mejor época de su historia con un Nacho Pizarro que cambió la dinámica del equipo, de nuevo Lidio Jiménez supo tocar la tecla correcta para traer a un jugador que no ha dejado de sumar desde que llegó y que ha hecho que la defensa haya sido infranqueable, este año con la compañía de unos sensacionales Juanjo Fernández, Alex Pozzer o Diego Vera, entre otros, han conseguido ser también la mejor segunda defensa de la liga.
