Hemos tenido la ocasión de hablar con Isabel Pelayo, responsable de comunicación del Museo Arcade Vintage de Alicante, ubicado en la localidad de Ibi. Gracias a la oportunidad que nos ha brindado este encuentro, hemos aprovechado la ocasión para pedirle a Isabel que nos comentase detalles acerca de este museo, de su labor en el campo de la conservación o sobre el origen de este proyecto entre otros datos interesantes.
PREGUNTA. ¿Quiénes sois? ¿A qué se dedica este museo?
RESPUESTA. El Museo Arcade Vintage es un museo que por el momento es único en España. Se dedica a la preservación y a la interacción con la historia más antigua del videojuego y también la más reciente. Nos dedicamos a cuidar máquinas arcade y a tener exposiciones de videojuegos, de consolas y de microinformática para el uso y disfrute de todo aquel que quiera venir a vernos.
P. ¿Cómo surge la idea de abrir un museo de arcade vintage?
R. El museo tiene su origen en la asociación Arcade Vintage que se formó en el 2013. Tenía tantos socios y había tantas máquinas que el local se estaba quedando pequeño, por lo que la creación del museo fue más bien una necesidad. Se barajaron muchas opciones con varios ayuntamientos, pero al final el de Ibi fue el que más nos convenció, porque nos ofreció la oportunidad de cedernos la fábrica de juguetes Rico, lo que nos pareció ideal para emplazar el museo.
P. ¿Cuántas personas estáis actualmente trabajando en el museo?
R. Seremos unas cuatro o cinco y a todas nos une que nos gusta el videojuego y el videojuego clásico también, pero cada uno cumple su función. Tenemos informáticos, electrónicos, programadores, electricistas y luego está la gente especializada con los medios.
P. El sector de los videojuegos cada vez crece más. ¿Habéis notado más afluencia de gente en el museo últimamente?
R. La verdad es que sí, hemos notado en estos últimos meses un crecimiento constante. Aparte de que el museo está en una zona muy turística, con lo cual estaba prevista una gran afluencia en verano, en los meses de invierno hemos notado que la afluencia se ha reducido con respecto a los meses de verano, pero no ha bajado tanto como nosotros esperábamos. De hecho hace poco, en febrero, hubo un sábado en el que casi tuvimos que colgar el cartel de aforo completo por la gran cantidad de gente que vino.
P. ¿Qué tipo de persona visita el museo? ¿Está orientado a todo tipo de públicos o es algo más específico?
R. La verdad es que la mayor parte de personas que vienen a visitarnos vienen en grupo y sobre todo familias, recibimos muchísimas familias diariamente. Ya sea por los padres o por los niños que tienen curiosidad o les hace ilusión, se interesan por el museo para conocer la historia del videojuego desde sus inicios. Suelen venir padres que por lo general son gente de treinta, cuarenta o cincuenta años que vivió la época de las arcade y los salones recreativos y que quieren enseñárselo a sus hijos. Por supuesto, también vienen aficionados a videojuegos retro de cualquier tipo.
P. ¿Podrías hablarnos un poco de que exposiciones tenéis ahora mismo y que podemos esperar si vamos a visitar el museo?
R. Tenemos varias exposiciones permanentes, tres concretamente. Tenemos la de las arcade y los pinball, que son a las que todo el mundo va, porque son las interactivas y sobre todo las más llamativas. Por otra parte, tenemos una exposición de microinformática, que tiene una zona que es únicamente para ver y leer los cartelitos y otra zona que es interactiva. Y por último tenemos la de las consolas, una serie de vitrinas que contienen consolas y ejemplos de juegos de consolas que recorren de manera cronológica toda la historia del videojuego de consola desde sus comienzos. Además, la semana pasada inauguramos una exposición temporal que estará con nosotros un mínimo de tres meses, que es sobre la conocidísima aventura gráfica The Secret of Monkey Island, que ahora mismo es la exposición sobre este videojuego más grande de Europa.
P. Has comentado que os visitan muchas familias. ¿Tenéis alguna actividad o taller infantil para los niños?
R. Tenemos una zona de consolas más actuales, de Wii U, de PS4, Xbox… Para que se entretengan. Luego tenemos otra zona, que es la zona gamer, donde tenemos seis ordenadores con sillas gaming y torres potentes para que los no tan niños, pero que todavía se aburren un poco con las arcade, se puedan entretener un ratito. Además, tenemos actividades para los más chiquitines del tipo Hama Beads los sábados.
P. ¿Cómo es el día a día del cuidado de una arcade?
R. Son arcades muy viejas, se suelen estropear bastante. Todas las semanas tenemos que dedicarnos a reparar todas las que se han estropeado por el uso durante el fin de semana. Tenemos que contar con programadores, reparadores…es tener mucho cuidado y tratarlas con mucho cariño porque tienen sus añitos y necesitan cuidado y mantenimiento constante.
P. El formato físico está desapareciendo debido a la digitalización ¿Cómo creéis que puede afectar esto a la preservación y en concreto al museo?
R. Todos los videojuegos que hay en las máquinas que tenemos nosotros están ya digitalizados en sistemas de emulación como MAME. Hay gente que se siente incómoda utilizando estos emuladores porque reducen un poco la experiencia de juego real, pero es algo necesario no porque cada vez este todo más digitalizado, sino porque el plástico y los elementos físicos como tal tienen una fecha de caducidad, no durarán eternamente. Es muy necesario que todos los videojuegos estén guardados de manera digital.
Una cosa que hacemos nosotros es digitalizar también la marquesina del arcade, los laterales, paneles, etc, las artes gráficas físicas, que es también muy importante. También estamos experimentando con un nuevo sistema para reimplementar los videojuegos de las máquinas, es decir, trasladar antiguos circuitos a nuevas placas.