Natural de Alacuas, pero con 35 veranos vividos y disfrutados en Carrascosa de Haro, un pequeño municipio de la mancha conquense, donde Vicente Morales Tribaldos disfruta de su familia y amigos cada verano y cada vez que el tiempo y los descansos de su trabajo se lo permiten.
Su familia materna se crío en la plaza del pueblo, donde se celebran las verbenas de cada fiesta de agosto y donde jugaba desde muy pequeño Vicente con una pelotita a buscar que entrara por debajo de los bancos, los que hacían de improvisadas porterías. Era el juego de aquel entonces de un pueblo que no contaba con pista deportiva, alternando la plaza, el denominado atrio y una era como sus campos de juego.
Ya tenía maneras y amor por el fútbol y por el deporte, lo que le llevó a estudiar INEF en Valencia para prepararse para un futuro prometedor, el cual comenzó en Alacuas, para pasar al Torrente y dar el salto al a las categorías inferiores del Villarreal, donde pudo disfrutar y dirigir la preparación de jugadores que hoy triunfan como Yeremi Pino.
Hizo un alto en el camino para llevar a cabo una beca de Investigación en Ciencias del Deporte Aplicadas al Fútbol en Liverpool y comenzar su primera experiencia alemana en septiembre de 2018, donde estuvo en el FC Saarbrücken de la Segunda División femenina.
Recibía la oportunidad del Hannover 96 en 2020, donde pudo disfrutar, aprender y seguir formándose en un equipo de alto nivel, de nuevo con los juveniles, como poco después en el Colonia, equipo previo al Bayer Leverkusen, donde está desde enero de este 2023, también con los juveniles.
Sigue dando pasos en su carrera con un club que es de los más importantes de Alemania y que tiene a los mandos del primer equipo a Xabi Alonso, un jugador al que siempre admiró y el cual puede ver todos los días dirigiendo al Bayer mientras él está con los juveniles. Uno de los privilegios que le ofrece la profesión como preparador físico, la cual ha conseguido a costa de trabajo, esfuerzo y formación.
Con todo y con eso, cada vez que coge un avión para volver a España tiene una parada obligatoria, que es Carrascosa de Haro, además de una llamada que nunca deja de hacer, que es la de sus amigos del pueblo, con los que se ha juntado cada verano, pero con un vinculo tan fuerte que les hace el seguir unidos estén donde estén.
