Los rojillos se impusieron a los moteños gracias al arreón final, en el que remontaron un 1-2 adverso para lograr el triunfo por 3-2.
El derbi en Primera Preferente no defraudó. Tuvo goles, polémica, ocasiones e intensidad. Un partido de los que hacen afición, especialmente para los intereses locales, que vieron como su equipo remontó un partido que parecía perdido en los últimos minutos.
Comenzó el partido con los dos equipos bien asentados sobre el césped del Obispo Laplana. Sin apenas espacios, ninguno de los contendientes era capaz de llegar con peligro al área rival. Fue en una imprecisión como llegó el primer tanto en el 16. Ni los centrales ni el portero del San José Obrero logran despejar un pase interior hacia Óscar, y Salido, a portería vacía, acierta a abrir el marcador. El gol espoleó a los de Mota del Cuervo, que encontraban muchas facilidades por ambas bandas. Así, en el 30, llegaría el golazo del partido. Óscar recibe abierto en banda izquierda, dribla hacia el interior y lanza un zambombazo que se cuela por la escuadra de la portería defendida por Toboso. Imparable.
El míster rojillo decidió entonces mover su banquillo para buscar la igualada. Quitó a un central, Collado, para dar entrada a un mediapunta, Pedro Adrián. Dejó defensa de 3, lo que parecía una jugada muy arriesgada con todavía una hora de juego por delante. La suerte sonrió a los locales, ya que en el 38, un saque de falta de Pinedo desde más allá de su campo se acaba convirtiendo en una asistencia para Roberto, que logra acortar distancias. Los defensas visitantes no fueron lo suficientemente expeditivos y permitieron al pichichi del San José poner el 1-2 en el marcador antes del descanso. Aún tuvo tiempo el San José Obrero para empatar el encuentro antes del intermedio, pero el cabezazo de Val a la salida de un córner se fue desviado por poco.
La segunda mitad tuvo el mismo guion que la primera. Aún así, el Mota del Cuervo, consciente de su ventaja, aguantaba un paso más atrás las acometidas rivales, pero salía con mucha rapidez a la contra. El San José Obrero empezó a pisar área con más frecuencia, aunque con poca regularidad. Pudo Dani Mora empatar en el 55, pero su remate se marchó alto, cuando lo tenía todo a favor para poner el 2-2.
Con ocasiones por ambos bandos, el partido encaró la recta final. En el 82 llegó el empate, con una gran jugada del San José Obrero que termina con disparo de Pedro Adrián desde el punto de penalti pero Edu, impecable durante todo el encuentro, logra despejar, aunque su rechace lo aprovecha en boca de gol Adrián de Julián. La euforia se apoderó de los locales, que vieron posibilidades de ganar el encuentro. Y así fue, gracias al tanto de Pedro Adrián en el 88. Una jugada calcada al segundo gol, en la que el mediapunta en esta ocasión sí acertó a marcar el remate.
Los últimos minutos estuvieron dominados por los nervios. Los de Mota del Cuervo sufrirían las expulsiones de Adrián y Cobo en dos feas acciones. El primero empujó al utillero del San José Obrero, mientras que el segundo pisó a Adrián de Julián cuando éste se encontraba en el suelo. Con estas acciones, apenas se jugó nada en esos minutos, por lo que lo que estaba siendo un partido precioso e intenso se convirtió en un campo de batalla. Por suerte, los jugadores de ambos equipos supieron comportarse y no pasó a mayores una vez el árbitro pitó el final.